Los más ruidoso del mundo!!!!

Mono Carayá, mono bramador o aullador, señores en la selva y en nuestra ciudad. El nombre “Carayá” proviene de la palabra guaraní karadyá, que posiblemente significa jefe del bosque; a su vez Karaí significa señor, persona distinguida. Es válido inferir que los guaraníes lo consideraban un animal equiparable a un señor que vivía en arboledas.

Su nombre vulgar de “aullador” se debe a los potentes aullidos y gritos que suelen emitir para marcar el territorio. Generalmente es comenzado por un macho y seguido por otros. Ante la presencia de algún peligro, las hembras chillan fuertemente mientras las madres con crías se refugian en las ramas altas de los árboles. Es imposible no escucharlos aun desde grandes distancias.

A nuestra ciudad llegaron casi todos de la misma manera, la mayoría donados por particulares que los mantenían como mascotas y ya no pudieron hacerse cargo de ellos; otros derivados por las autoridades para que se incorporaran a la familia de monos del Zoo.

Innumerables son las historias, cada uno de ellos llega con un largo camino recorrido. Así quienes desde hace muchos años visitan el Zoo pueden encontrarse con Morgan, el macho alfa, dentro de una serie de monos carayás , tiene 9 años y encontró una compañera, Judi, una hembra que ya tiene 7 años y que hoy es el centro de nuestra historia. Judi puntualmente fue donada por una familia compuesta por mamá , papá y un niña de 4 años. A los pocos días de recibir a Judi en el Zoo vimos cómo ella invitaba a los gatos para que ingresaran en su espacio, comenzaba a acicalarlos y cuidarlos pasando juntos varias horas, abrazada a ellos, tomando sol, haciendo pequeñas siestas. Este comportamiento llamó la atención a los cuidadores. Mayor fue la sorpresa cuando una de las tantas veces en que aquella familia vino a visitar a Judi, al ver esta postal “la mona junto a los gatos” se emocionaron, y ahí conmovidos, explicaron que la mona y la nena de la casa pasaban muchas horas jugando con un peluche que representaba a un “gato”. Judi se había integrado a su nueva familia del Zoo y al mismo tiempo intentaba conservar algo de lo que había sido su vida anterior. Muy linda para todos esta historia. Los cuidadores del Zoo prestan especial atención a estos aparentes pequeños detalle que en verdad hacen una gran diferencia en el proceso de adaptación de los monos a su nueva familia. Tal es el caso de otra monita Jopy , a esta última le encanta caminar junto a una de sus cuidadoras al aire libre.

Evidentemente lo ideal es no necesitar llegar a todos estos procesos de adaptación y por ello estos animalitos no deberían ser incorporados como mascotas. Su hábitat natural está lejos de nuestras ciudades, en los árboles, por donde se desplazan con gran habilidad. Rara vez bajan al suelo. Viven en las zonas de selva donde el follaje es denso y está al resguardo. En las horas de bajas temperaturas suben a las ramas altas en busca del calor del sol. Se alimentan de semillas, frutas, flores y eventualmente carne. En el Zoo Luján de frutas y también gustan de alimentos cocidos. La gestación dura aproximadamente 6 meses y medio, pudiendo tener una cría raramente dos, que al nacer pesa aproximadamente 100 gramos, en el hábitat natural viven un promedio de 14 años, en cautiverio, asistidos, alrededor de 21.

Los machos son de pelaje negro, las hembras, marrón, uno de los pocos casos conocidos en primates de “dicromatismo sexual” (diferencia de color entre machos y hembras). Su cola prensil es casi un brazo más, ya que es de gran ayuda para desplazarse por las ramas. Suelen moverse en grupos.

Vení a visitarlos, ellos, los “señores de la selva”, te esperan para compartir un lindo momento en el Zoo Luján.